lunes, 14 de abril de 2014

El pensamiento

El pensamiento es alma de la palabra.
Voz del silencio infinito.
Sueños sin amo, polen del numen.
Una musa hablando a tu oreja,
cuando andas en el caos del ruido.
En calladas formas se expone,
cada idea te trae una sorpresa.
Singulares instantes,
atisbos de portentos,
mejor si te encuentran atento.
En el intento de unir los elementos,
tus defectos no afectan los efectos.

Insomnio



Mosquitos volando muy cerca de mis ojos.
Inquieto silencio fracasa al intentar dormir.
Campanas de costumbre, llaman a la fe matutina.
Gatos huérfanos, confiados, vagan azoteas.
Perros peleoneros defienden su esquina.
Luciérnagas de pólvora mueren en el piso.
Asustadizos grillos interrumpen su arrullo.
Se confunden los gritos de alegría y espanto.
Esas explosiones seguro fueron de balas.
Calles fiesta, casas velorio; nadie descansa.
Luna paseó en el cielo mientras yo la veía.
Tras larga cabalgata, baja cansada; aparca.
Pájaros despiertan puntuales y aún es noche.
Tumulto de autos, prisa, ira y reproches.
Tonta pendencia, sin consciencia, por inercia.
Rota la calma de la hermosa claridad.
Mala realidad de luz y ruido; triste despertar.

Un largo día

Sol del polo,
que brillas
en la fría
noche blanca.

Detenido,
sobre la cumbre
solitaria
del mundo.
Solsticio de verano.

Errante,
el viento
ulula
por mil rutas.

Hielo perenne
se extiende
hacia el centro,
en gélidas brisas.

Luces caprichosas,
almas de escarcha
danzan, se iluminan
con el viento solar.

Medio giro,
después de días
oscurece el cielo;
sin luz, la noche
parece eterna.
Solsticio de invierno.